
Raziel Roldán/Papantla. El representante de la de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en México, Frédéric Vacheron, señaló que para que la zona arqueológica de El Tajín, conserve la designación de Patrimonio Histórico, es necesario su preservación, por lo que se hace un monitoreo estricto y constante.
«Hay directrices que la convención del 72 que el INAH está siguiendo en diálogo con la UNESCO para que haya un plan de manejo que asegure la autenticidad del sitio y que no se pierda nunca el valor universal por lo cual fue inscrito en la lista».
Y es que para mantener ese nombramiento es necesario conservar su autenticidad, por lo que no se puede afectar su integridad, es decir reconstruir ni construir nuevos edificios, además de que debe haber una interacción respetuosa de las comunidades y del turismo.
«No se puede subir sobre los monumentos, no se pueden hacer intervenciones que puedan dañar ese patrimonio, que es frágil y que cada piedra habla, cada piedra es un elemento de investigación».
Sobre el patrimonio material del sitio, dijo que hay otro comité que es de la convención del 2003, que además monitorea el plan de salvaguardia de los Voladores para que esa expresión no solamente se preserve sino también se recree.