Juan David Castilla.- Ambientalistas alertaron que los ríos de la Cuenca de la Antigua continúan contaminándose al acercarse o pasar por centros de población con aguas residuales.
Miriam Ramos, integrante de la organización Global Water Watch México, enfatizó que en las cabeceras de cuenca, la población no conoce el papel que juega el territorio que habitan en la dinámica de la cuenca.
Mediante los monitoreos que han realizado en el estado de Veracruz, indicó que los manantiales de zonas con arroyos y ríos muy contaminados presentan niveles altos de contaminación fecal en época de lluvias.
Otro problema es que el caudal de los ríos ha mermado y los arroyos se secan más frecuentemente, como ha sido el caso del Pixquiac en Coatepec, durante la última década.
“Los asentamientos irregulares en centros de población propicia la desaparición de manantiales, el vertido directo de aguas residuales y la canalización o entubamiento de arroyos para ganar espacio para edificar”, añadió Miriam Ramos.
También refirió que la zona federal de las márgenes de los ríos se invade con cultivos, pastizales para ganado y con pavimento.
Las riberas se encuentran fuertemente deterioradas, lo cual incide negativamente en su función como reguladores de sedimentos y dispersores de la energía del agua.
“A la población le preocupa la escasez de agua y la contaminación, pero le faltan herramientas para revertir estos impactos”, remató.