Asesinatos, secuestros y asaltos demuestran el terrible desprecio por la vida
Yhadira Paredes. Xalapa, Ver.- La Arquidiócesis de Xalapa asegura que la violencia generalizada manifestada en asesinatos, secuestros y asaltos, la imposición de la agenda de género y del pensamiento único vacían de espiritualidad y racionalidad la vida de occidente y acusó que hay un desprecio terrible por la vida.
A través del comunicado de prensa de cada domingo, el padre José Manuel Suazo refirió que los estragos de la cultura de la muerte está dejando a todos en estos últimos tiempos de crisis, descomposición social y sin rumbo.
“Los creyentes estamos llamados a responder con esperanza y con una actitud positiva a través de diferentes acciones que nos ofrece la cultura de la vida. No podemos ni debemos quedarnos paralizados frente a lo que está sucediendo en estos tiempos turbulentos”.
Ante esta situación, dijo Suazo Reyes, resulta alentador encontrar cada vez más con organizaciones civiles, grupos, asociaciones y personas en general que comulgan con la causa de la vida y la promoción de las instituciones familiares que la historia de la humanidad ha dejado como un patrimonio valioso.
“La Iglesia católica se siente respaldada y motivada por todas estas organizaciones que se mantienen firmes y perseverantes en esta lucha. Y por su parte mantiene como opciones pastorales la defensa y la promoción de la vida, el matrimonio y la familia, así como de las libertades fundamentales. Para responder a los desafíos que se encuentran actualmente en estos temas”.
Asimismo, señaló que nivel nacional e internacional se ha reconocido que la Iglesia es la única institución que se opone a la antropología marxista y a la cultura de la muerte, lo que les anima saber que esta labor milenaria de la Iglesia, que se ha asumido con espíritu apostólico en los últimos años, ha motivado también el compromiso y el liderazgo de muchos hermanos para frenar los ataques oficiales a la vida, las instituciones familiares y las libertades fundamentales.
Finalmente, acusó al Estado de utilizar cifras inexistentes y genera una percepción diferente, pero nuestro pueblo está en contra del aborto y de la ideología de género que promueve desde las instituciones de gobierno una serie de programas y medidas que afectan seriamente el matrimonio y la familia.