De burócrata a taxista; historia de lo difícil que es ganarse la vida
Juan David Castilla Arcos. Xalapa. José David Serrano ejerce un oficio que ha dejado de ser rentable en la capital del estado.
Todos los días conduce un taxi; sin embargo, en la actualidad, sus ganancias sólo le alcanzan para comer.
Labora en la Base 62, que se encuentra a un costado de la Central de Autobuses de Xalapa (CAXA) desde hace casi tres años.
En el arranque de año, sus finanzas empeoraron. En un día, solo ha logrado recaudar entre 50 y 100 pesos para él y su familia.
En diciembre, la temporada más fuerte del año, obtuvo hasta 300 o 400 pesos al día.
“Pero la gente se queja (de las tarifas) porque dice que no ha subido la gasolina y este primero de enero tuvimos otro incremento en la gasolina”.
José David y sus compañeros se han visto en la necesidad de reajustar las tarifas por los recientes gasolinazos.
Recuerda que a partir del día 1º de enero la gasolina premium subió 14 centavos y, la magna, 16 centavos. En promedio, el litro cuesta 20 pesos con 48 centavos y 19 pesos con 80 centavos, respectivamente.
Si anteriormente la tarifa mínima era de 25 pesos, ahora es de 35 pesos.
El taxista cobra 35 pesos de CAXA al Centro Histórico de la ciudad.
Sin embargo, se ha topado con pasajeros que “regatean” o que, incluso, pagan menos de lo solicitado.
EXEMPLEADO DEL GOBIERNO
Pepe, como lo llaman sus familiares, amigos y compañeros, tiene 47 años. Hasta hace unos años trabajaba para el Gobierno del Estado.
Sin embargo, en el sexenio de Javier Duarte de Ochoa fue despedido.
Después, fue contratado como chofer en la iniciativa privada y, posteriormente, también fue empleado del Ayuntamiento de Xalapa.
No obstante, los recortes de personal siempre lo alcanzaron.
Fue así como decidió conducir un taxi para ganarse la vida.
“Es como todo, hay días buenos y malos, altas y bajas. Si la gente pagara lo justo, sacaríamos 200 pesos diarios”.
Recientemente, un señor solicitó sus servicio en Plaza Museo para que lo transportara a Coatepec.
José David cobró 130 pesos por esa corrida. El usuario pagó esa cantidad y agradeció por mantener la unidad limpia.
“Me estaba diciendo el señor: me gustan más los carros limpios que uno sucio y destartalado, porque para bajar hacia Coatepec, la carretera está resbalosa, pero yo sé que llegaré seguro a mi casa y pagaré lo que es. Pocas personas piensan igual que usted”.
Otro aspecto que ha perjudicado a los taxistas actualmente ha sido la competencia desleal.
OPERA INDRIVER
InDriver es un servicio internacional de transporte público que opera sobre la base del modelo “Ofertas en tiempo real”. Se trata de una aplicación móvil, cuyo servicio cuenta con más de 38 millones de usuarios en 31 países.
Sin embargo, a juicio del taxista, en Xalapa, lo inició una persona que busca afectar al transporte público en modalidad de taxi.
La empresa coloca precios de 12, 15 y 20 pesos, sin ninguna regulación por parte de la Dirección General de Tránsito del Estado y Seguridad Vial.
José David asegura que hay diversas quejas en contra del servicio que es solicitado desde una aplicación de teléfono celular.
Actualmente, en la zona de Xalapa operan cerca de 120 unidades de InDriver, cuyos vehículos son particulares y taxis.
“Hay quejas de que no llega el taxista. Uber también entró pero vieron que las tarifas no dan por el tráfico”.
Y es que en la zona Xalapa hay cerca de 15 mil taxis.