Eda Sentíes/Veracruz. Investigadores del Tecnológico de Boca del Río trabajan en un proyecto para remediar los daños que provocó el tiradero a cielo abierto del municipio de Cuitláhuac al río Grande que desemboca en el Sistema Arrecifal Veracruzano.
La doctora Fabiola Lango Reynoso, jefa del Laboratorio de Investigación Acuícola Aplicada, explicó que el objetivo es contener el avance de los lixiviados que han llegado a este cauce y que sirva como un modelo para aplicar en todos los tiraderos del estado para que realmente cumplan su función de relleno sanitario.
«La primera etapa es crear una celda de contención y de tratamiento de lixiviados con tecnología de barreras permeables que es como un filtro para colar los contaminantes de los lixiviados (…) La idea es que esa propuesta sea un modelo para los basureros ya que no cumplen con las normas», aseveró.
Por el momento los especialistas solo trabajan con el basurero de Cuitláhuac, pero en el caso de Veracruz estas estrategias también se podrían poner en marcha para solucionar el problema que mantiene clausurado este espacio desde julio de este año.