Día de muertos, más que una tradición mexicana

Eda Sentíes. Veracruz. No hay duda de que los altares llenos de flores y comida acompañando las fotos de los seres queridos que se nos adelantaron son la principal característica en la celebración del Día de Muertos, sin embargo, la riqueza cultural con la que contamos en México y en especial en Veracruz hacen que, dependiendo de la región, cada celebración tenga sus peculiaridades.

Mientras al norte del estado, se realiza un baile llamado “viejada” en el que los participantes usan máscara y al finalizar todos caminan al cementerio donde dejan sus ofrendas Bailan, cantan y comen con sus difuntos, en el Puerto de Veracruz se llevan a cabo concursos de calaveritas, altares y hasta catrinas, donde la creatividad y arte se plasma en el rostro de los jarochos y la figura de la muerte como la creó José Guadalupe Posada sigue siendo una tradición en esta celebración.

“Yo creo que en el puerto de Veracruz se celebra el día de muertos muy similar a la de otros lugares, pero últimamente se han puesto muy de moda los concursos de catrinas, desde niños hasta grandes se disfrazan, se pintan la cara con esta figura que representa la muerte mexicana y esto hace que se conserve el folclor mexicano. En lo particular me gusta disfrazarme de catrina y me gusta que en esas fechas mi casa tenga decoraciones de ese tipo”, señaló Genoveva Rosales.

Los más tradicionalistas, realizan el habitual ritual, recuerdan a sus familiares como eran en vida y bajo la ferviente creencia que esa noche visitan sus hogares preparan festines con su comida favorita y hasta rezan rosarios para pedir por el descanso de su alma, como Gertrudis Ramírez y su familia.

“Para nosotros el día de muertos es algo especial. Tenemos arraigada esa costumbre, por lo regular desde l 31 montamos el altar en la casa entre mis hijo, mi esposo y yo, adornamos, sacamos fotos de nuestros difuntos, porque si tenemos la firma convicción de que ellos se hacen presente esos días y pasa como le digo yo, a lo mejor no los vemos, pero su esencia se siente y presiente en la casa, el día de muertos se les lleva flores al panteón aquí en su casa rezamos rosarios y nos ponemos a platicar anécdotas”, señaló Gertrudis Ramírez.

En algunos hogares el Día de ​Muertos gira en torno a la comida; preparar tamales y hornear pan son las principales actividades, como pasa en casa Armando López.

“Aquí en mi casa tenemos la costumbre sobre todo, de la comida; los tamales, el pan, siempre procuramos poner un altar para que nuestros seres queridos puedan venir y tenemos esa creencia de que vienen y al menos pueden ver que no los olvidamos y que estamos todavía acordándonos de ellos y esperamos siempre que esto no se acabe y sigamos conservando estas tradiciones”, señaló Armando López.

Por otro lado, las calaveras no solo ponen a prueba el ingenio y creatividad, también la memoria, al menos así pasa en casa de Ariadna González, donde el día de muertos se celebra leyendo calaveras que contengan anécdotas de sus seres queridos contadas a través de las rimas.

“Si duda es una fecha que mi familia disfruta mucho, nos reunimos en la casa, toda la familia se junta a comer tamales, pan y acostumbramos a hacer calaveritas de nuestros familiares y de todas las anécdotas que vivimos junto con ellos y eso hace que sea divertido y yo creo que al mismo tiempo vamos fortaleciendo cada vez más lo lazos entre nosotros como familia y vamos rescatando esas tradiciones”, señaló Ariadna González.

No importa la forma en que decidamos celebrar el Día de muertos, lo importante es que hacerlo fortalece nuestra identidad y nos brinda cohesión social, ademas de ser una excusa para estar con la familia y fomentar nuestras tradiciones.