Eda Sentíes
Veracruz, Ver.- El ex obispo de Veracruz, Luis Felipe Gallardo Martín del Campo, lamentó y condenó el asesinato de dos sacerdotes jesuitas en la comunidad de Cerocahui en el estado de Chihuahua.
Señaló que estos hechos son una muestra más de que la estrategia se seguridad implementada por el Gobierno Federal no ha sido suficiente para contener la ola de violencia que se vive en todo el país.
Dijo que las autoridades han abandonado al pueblo frente a la delincuencia y se han convertido en un espectador más del crimen.
“Nadie se salva, estamos en tema de la violencia estamos totalmente abandonados, no han servidos las estrategias, si la obligación es que nos den seguridad y los pobres nada más ven qué sucede porque también son seres humanos, si pero están matando, por lo menos péscatelos y a la cárcel”, comentó.
El ex obispo recordó que en Veracruz los párrocos y las iglesias también han sido víctimas de la delincuencia, pues se le ha pedido derecho de piso, intentos de extorsión y hasta secuestros.
“Ahora el derecho de piso no solo se lo piden a los comerciantes, también a las iglesias (…) Mientras estuve de obispo diocesano tuvimos dos casos, los secuestraron y los fueron a tirar quién sabe a dónde pero vivos, cuando mucho algún golpe, en un caso fueron dos seminaristas que rápidamente los marinos los ubicaron, en otro fue en un tramo de Acula a Cosamaloapan que lo dejaron tirado a medio camino quién sabe dónde”, concluyó.
