Franceses critican celebraciones de su selección tras triunfo en Mundial (+Video)
París, 17 de julio/Notimex. Asociaciones de fanáticos, aficionados y seguidores de la selección francesa criticaron las celebraciones de la victoria de la selección nacional en el Mundial de futbol, que se limitó a un desfile de 12 minutos por la Avenida de los Campos Elíseos de París, demasiado corta para los aficionados.
En redes sociales, la Asociación de Seguidores de los Equipos de Francia, consideró que los jugadores de la selección, campeona del mundo el domingo pasado, están desconectados “de su base” popular.
Criticó que el momento de contacto de los seguidores con los seleccionados galos se limitara a los 12 minutos que duró el descenso del camión sin techo del equipo por 1.3 kilómetros de la Avenida de los Campos Elíseos, en donde 300 mil personas se concentraron para el festejo.
Medios locales recordaron que cuando la selección francesa ganó el Mundial de 1998 pasó cuatro horas en la avenida y en la vecina Plaza de la Concordia de París para celebrar con los aficionados la victoria de su primera Copa del mundo.
“Nunca olvidaremos la vergüenza de los Campos (Elíseos) del lunes”, añadió la asociación “Irresistibles franceses” en varios mensajes publicados por medios locales.
“No hemos tenido el tiempo de verles”, se quejó de su lado una espectadora al diario Le Figaro por el caso que ha generado polémica en esta nación.
El delantero de la selección francesa Olivier Giroud reconoció en declaraciones a medios locales que la celebración con el público “pasó rápido”.
“Creo que fue por razones de seguridad. Quizás no podíamos hacer como hace veinte años. La gente estaba a distancia pero sentimos el fervor”, añadió el jugador.
Los jugadores tampoco acudieron a mostrar la Copa al hotel Crillon de la Plaza de la Concordia de París en donde les esperaban miles de seguidores.
El grupo pasó toda la tarde de su llegada a París en las celebraciones organizadas en su honor en el Palacio presidencial del Elíseo ante mil 300 invitados encabezados por el presidente francés, Emmanuel Macron.
