Hallan sin vida a 6 de los 7 jóvenes secuestrados en Villanueva, Zacatecas
Las autoridades de Zacatecas encontraron sin vida a seis de los siete jóvenes desaparecidos en la comunidad de Malpaso, del municipio de Villanueva. Solo uno de los adolescentes, cuya identidad no fue revelado, sobrevivió y está siendo atendido en el Hospital General del Estado.
De acuerdo con El País, lo anterior fue confirmado por el secretario de Gobierno estatal, Rodrigo Reyes. El mismo helicóptero que avistó al único superviviente localizó al menos tres cuerpos ya sin vida en la misma zona. Cuando los agentes acudieron al lugar, se encontraron con los seis cadáveres. Sus familiares están ya identificando los restos.
Los siete muchachos fueron secuestrados en la madrugada del domingo 24 de septiembre por un grupo de hombres armado. Sus identidades son Jorge Alberto René Ocón Acevedo, de 14 años; Óscar Ernesto Rojas Alvarado, de 15; Diego Rodríguez Vidales, de 17; Héctor Alejandro Saucedo Acevedo, de 17; Sergio Yobani Acevedo Rodríguez, de 18; Gumaro Santacruz Carrillo, de 18; y Jesús Manuel Rodríguez Robles, también de 18.
Además, se detuvo a dos jóvenes que “pudieran tener relación con los hechos de desaparición”, informó el fiscal general de Zacatecas, Francisco Murillo. Los dos sospechosos, “originarios de Durango”, “están puestos a disposición de la Fiscalía General de la República”. Fueron arrestados en Genaro Codinas, un municipio a 70 kilómetros de Malpaso, la comunidad de Villanueva en la que fueron secuestrados los siete jóvenes.
⇒ La madrugada del domingo 24 de septiembre, un grupo de hombres armados irrumpió en el rancho El Potrerito, donde descansaban los siete jóvenes. Habían pasado la noche del sábado juntos y se quedaron a dormir. Tres de ellos eran primos hermanos, el resto, amigos muy cercanos porque estudiaban juntos en el instituto local.
Durante la tarde del martes y la mañana de este miércoles, familiares de los jóvenes desaparecidos bloquearon la carretera federal 54, que une Zacatecas con Guadalajara, Jalisco, para ejercer presión sobre las autoridades. “Son unos niños, todos son estudiantes”, aseguró el padre de uno de los jóvenes.