Hongo parásito podría ayudar a encontrar la cura contra el cáncer

Redacción/Xalapa. Los científicos están empezando a experimentar con los efectos de las propiedades anticancerígenas que posee el hongo de la oruga del Himalaya.

Gracias al reconocimiento de los medicamentos empíricos, entre ellos y la más utilizada, la medicina China está siendo puesta a prueba por análisis científicos y está dando resultados que ayudan al avance de medicamentos.

La enfermedad del cáncer es un mal que sigue dejando víctimas, al no ser producida por un agente externo los avances sólo se han propuesto disminuir el error celular.

El hongo parásito Ophiocordyceps sinensis, o conocido comúnmente como hongo de la oruga del Himalaya, a demostrado un potencial anticancerígeno denominado cordicepina.

La medicina china utilizaba desde hace siglos este hongo en infusiones o crudo para tratar enfermedades como asma y cáncer.

Investigadores de la Universidad de Oxford en asociación con la empresa biofarmacéutica NuCana, han sintetizado el prefármaco NUC-7738, cuyo componente activo es la cordicepina o 3‘-desoxiadenosina (o 3’-dA).

A parte de los efectos anticancerígenos también tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorios.

El fármaco se encuentra aún en etapas de pruebas experimentales y no está disponible como medicamento contra el cáncer, pero los resultados de los ensayos clínicos son favorables para ser candidato a fármaco.

NUC-7738, gracias a la intervención de la ingeniería genética, es resistente a descomponerse en el torrente sanguíneo, ya que tienen protección incorporada contra la enzima adenosina desaminasa ADA, la cual degrada la cordicepina natural.

Según el estudio publicado en Clinical Cancer Research, estos cambios hacen que las propiedades anticancerígenas del candidato a fármaco sean hasta 40 veces más potentes que la cordicepina natural.

El ensayo clínico de fase 1 comenzó en 2019, y se ha utilizado en el tratamiento experimental ha involucrado a 28 pacientes con tumores avanzados que eran resistentes al tratamiento convencional.

A pesar que todavía falta que se testen las pruebas pertinentes para que este medicamento esté disponible, los especialistas son optimistas al respecto y ya se encuentran preparando la fase 2 el ensayo.

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