Jean-Pierre Rampal, recordado por ser un virtuoso ejecutante de flauta
México, 19 de mayo/Notimex. A 18 años de su muerte, el músico francés Jean-Pierre Rampal es recordado por su destreza y talento artístico, pues se dedicó en devolver a la flauta su popularidad como un instrumento clásico solista.
Después de que estudió tres años de medicina, decidió cambiar de carrera y especializarse en el área musical, ya que esto era para él su verdadera razón de existir.
Durante su trayectoria se convirtió no sólo en un virtuoso ejecutante de flauta, sino en un incansable promotor del repertorio para ese instrumento.
Se calcula que dejó para la posteridad más de 300 grabaciones discográficas y el libro de memorias Música, mi vida, de 1989.
Jean-Pierre Rampal nació el 07 de enero de 1922, en Marsella, Francia. Su padre, Joseph Rampal, era primer flautista en la Sinfónica y profesor en el Conservatorio, y de él recibió sus primeras lecciones de música a los 12 años.
Cuentan sus biógrafos que a los 16 años dio su primer recital como flautista y obtuvo su primer premio. Pero sería hasta mucho después que Rampal, ya comenzados sus estudios de Medicina, decidió seguir la carrera artística.
Cursaba el tercer año en la Escuela de Medicina cuando las fuerzas de ocupación nazi le enviaron a realizar trabajos obligatorios a Alemania, pero en vez de reportarse al servicio, pasó a la clandestinidad y huyó a París.
Pese a la insistencia de su madre, nunca retomó esos estudios, pues comenzó a tomar diversos cursos en el Conservatorio Nacional y cinco meses después se graduó con todos los honores, obteniendo el primer lugar entre todos los flautistas, premio que Joseph, su padre, había ganado en 1919.
Terminada la Segunda Guerra Mundial, Rampal fue invitado a participar como solista en un concierto de flauta junto con la Ópera de París, presentación que lo catapultó a la fama.
Los 10 años siguientes, Jean-Pierre se dedicó a ser intérprete solista y fue cuando decidió brindar una serie de conciertos empezando en su natal Francia, para después trasladarse a Suiza, Austria, Italia, España y los Países Bajos, al lado de su inseparable compañero, el pianista Robert Veyron-Lacroix, a quien conoció en 1946.
En 1955 se convirtió en el primer flautista de la Ópera de París y luego desarrolló sus actividades como solista e intérprete de música de cámara. Fundó el Conjunto Barroco de París y el Quinteto de Vientos Francés.
Para los años 60, Rampal era considerado el más virtuoso flautista internacional, pues trabajó con las mejores orquestas del mundo en ese tiempo, pero siguió reviviendo la música, sobre todo barroca, como lo había venido haciendo desde 1945.
Hasta finales de los 80 gozó de mucha fama, sobre todo en América y Japón, lo que le valió que se instituyera el Concurso de Flauta Jean-Pierre Rampal, que desde ese año se efectúa anualmente premiando a los mejores flautistas del mundo.
Fue nombrado profesor del Conservatorio de París en 1989 y durante los siguientes veranos ofreció cursos en la Academia Internacional de Niza. Colaboró con otros artistas como Isaac Stern, Yehudi Menuhin y Mstislav Rostropóvich, en esta época se atrevió a dirigir algunas importantes orquestas europeas.
Se puede decir que grabó prácticamente todas las obras importantes para este instrumento. Además incursionó en géneros como el jazz, el folclore, la música popular y la oriental.
Compositores como Jolivet, Francaix, Martinon, Poulenc y Boulez le dedicaron partituras, y como muestra de ello, en 1991 estrenó el Concierto para flauta escrito especialmente para él por Krzysztof Penderecki.
En 1999 entró por última vez al estudio de grabación y fue para hacer un disco de tríos y cuartetos con el trío Pasquier y acompañado por el flautista Claudi Arimany.
El sitio especializado Allmusic.com recordó entre los premios que recibió el de Chevalier of the Legion d’Honneur (1996), Officier des Arts et Lettres (1971), Commandeur de l’Ordre National de Mérite, el Prix du Président de la République, and the Prix du Académie Charles Cros.
El 20 de mayo de 2000, Jean-Pierre Rampal murió de un problema cardiaco, a los 78 años de edad.
Cinco años más tarde fue creada la Fundación Jean-Pierre Rampal para dar continuidad al estudio de la flauta solista y a la apreciación y contribución que Rampal hizo a la interpretación de este instrumento en el siglo XX.