Ministra, Yasmín Esquivel, llama a no normalizar violencia contra las mujeres
Carlos Guzmán /En Contacto. Todos los días se mata o se violenta a niñas mexicanas sin importar sus condiciones sociales o económicas, por lo cual no se debe normalizar esta situación, aseguró la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel Mossa.
Asimismo, agregó que este problema revela la violencia cotidiana que hay en el país contra la mujer, por lo cual llamó a la sociedad en su conjunto a actuar contra este mal.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, durante su Conferencia Magistral “El Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”, que impartió en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), aseguró que este fenómeno trae graves consecuencias sociales y representa un problema de salud pública.
“El carácter desproporcionado de la violencia hacia el género femenino se relaciona con el poder que se ejerce y que está relacionada con una violencia instrumental”, indicó Esquivel Mossa.
En el mismo sentido, dijo que todas las formas de violencia hacia la mujer son una manifestación de poder hacia ellas, el cual se visibiliza y se formaliza con la pareja y en el trabajo, “y esto no debe permitirse”.
Calificó a la violencia como un lastre que arrastra a las mujeres desde que se tiene registro en todas las culturas, y es a las niñas y adolescentes a quienes se coloca en situación de mayor vulnerabilidad.
Destacó que el Artículo 4º Constitucional contempla la garantía a un trato igualitario, del cual se desprende el derecho a una vida libre de violencia.
Esquivel Mossa pidió que la sociedad mantenga la indignación ante todo hecho de violencia contra las mujeres, ante las posturas institucionales o sociales de indiferencia o normalización de esas conductas.
De lo contrario, dijo, no existirá la posibilidad de construir de manera conjunta soluciones a las demandas de seguridad y justicia, destacó la Ministra.
Indispensable el acceso de las mujeres a los
Centros de Atención y Cuidado Infantil de la CDMX
La Ministra Yasmín Esquivel Mossa en la sesión de hoy del Pleno de la SCJN se pronunció en contra de declarar inválido el artículo 27 de la Ley que Regula el Funcionamiento de los Centros de Atención y Cuidado Infantil de la CDMX (CACI), que establece el derecho de preferencia para que accedan a dichos centros los descendientes de madres adolescentes y de adultas hasta los 22 años 11 meses, que por asistir a la escuela no puedan proporcionar la atención y cuidados necesarios a sus hijas e hijos; así como la preferencia de las madres víctimas de violencia intrafamiliar; y de las madres solteras que requieran la atención de su niña o niño por motivos laborales.
En su participación, la Ministra Esquivel señaló que “México suscribió la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, que le obliga a establecer medidas especiales de carácter temporal encaminadas a acelerar la igualdad de facto entre el hombre y la mujer, lo cual es precisamente lo que acontece en el caso, ya que las normas reclamadas de ningún modo excluyen a los descendientes de los hombres que demandan su ingreso CACI –lo que sería contrario a dicha Convención– sino que solamente coloca a los hombres en un lugar distinto de preferencia del que corresponde a las mujeres en situación vulnerable”.
La Ministra enfatizó que no es suficiente garantizar a la mujer un trato idéntico al del hombre, sino que también deben tenerse en cuenta las diferencias biológicas que hay entre la mujer y el hombre y las diferencias que la sociedad y la cultura han creado. En ciertas circunstancias será necesario que haya un trato no idéntico de mujeres y hombres para equilibrar esas diferencias. El logro del objetivo de la igualdad sustantiva también exige una estrategia eficaz encaminada a corregir la representación insuficiente de la mujer y una redistribución de los recursos y el poder entre el hombre y la mujer.
Para concluir, señaló la Ministra Esquivel que la deserción escolar es más numerosa entre las adolescentes de 12 a 18 años, y que las mujeres son, en un número mayor que los hombres, quienes ven truncados sus estudios por razones de la maternidad. Indicó que las madres víctimas de violencia intrafamiliar, a quienes también la ley les brinda preferencia, constituyen un grupo vulnerable de la población, donde habitualmente el padre de sus hijos es quien ejercen violencia sobre ellas, por lo que sería ilógico pensar que quien es el agresor puede hacerse cargo de los hijos de ambos, además de que también son muchas veces las mujeres, el único sostén de sus hogares, sin contar con el apoyo de una pareja que las apoye en la crianza de sus descendientes, por lo que es necesario preferirlas para el ingreso a los CACI de sus descendientes.
