Personal de la Embajada de Argentina en Venezuela abandona el país

El personal de la Embajada de Argentina en Venezuela dejó este jueves el país tras la decisión del Gobierno de Nicolás Maduro, anunciada el pasado lunes, de expulsar al personal diplomático de siete países de la región por sus posturas sobre la reelección del mandatario el 28 de julio.

“El Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la República Argentina comunica que hace instantes el personal diplomático, agregados militares y agregado administrativo que prestaban funciones en la Embajada argentina en Venezuela abandonaron dicho país junto a sus familias”, anunció la Cancillería argentina en un comunicado.

El ministerio había anunciado a primera hora de este jueves que Brasil asumiría la custodia de los locales de la misión argentina en Caracas, así como la protección de los opositores al Gobierno de Maduro, asilados en la residencia de la embajada desde el 20 de marzo y cuya situación había generado una fuerte polémica y preocupación.

“Han sido días y meses muy desafiantes para el personal de la embajada, en los que han dado muestras incuestionables de su profesionalidad, su calidad humana y su sentido del deber, tanto en la protección de los intereses de la Nación Argentina como así también de la vida y la libertad de los seis asilados políticos refugiados durante más de cuatro meses en la embajada”, agregó Cancillería.

El comunicado destacó, además, que la partida del personal de la sede diplomática la ordenó “el presidente Nicolás Maduro como consecuencia del desconocimiento y rechazo” por parte del Gobierno argentino del “fraudulento resultado de la elección presidencial ocurrida el pasado 28 de julio” y expresó su deseo de que puedan retornar muy pronto “a cumplir sus funciones en una Venezuela libre y democrática”.

Esta salida es consecuencia de que el Gobierno de Maduro exigiera este lunes a Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay “el retiro, de manera inmediata, de sus representantes en territorio venezolano”, en rechazo a sus “injerencistas acciones y declaraciones” sobre los comicios presidenciales.

En los días siguientes a las elecciones, cuyos resultados denuncia la oposición y por parte de la comunidad internacional, el Gobierno de Javier Milei había denunciado fraude y expresado su preocupación por la seguridad de los seis políticos opositores asilados en su sede diplomática, que, según las autoridades argentinas, fue objeto de “hostigamiento” por parte de agentes locales durante los últimos días.

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