Redacción/Xalapa.- Durante 2019, el Ayuntamiento realizó una inversión histórica en las congregaciones y colonias de la periferia, donde anteriormente llegaba poca obra, y en 2020, con el esfuerzo e inversión conjunta de los gobiernos Federal, Estatal y Municipal, así como de la asociación civil Hábitat para la Humanidad México, se entregarán 176 casas para igual número de familias, como parte del Programa de Vivienda Social.
Para ello, a través de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), la Federación aporta 4.4 millones de pesos; el Estado, mediante el Instituto Veracruzano de la Vivienda (Invivienda), 21.7; el Ayuntamiento de Xalapa, 7.7 millones de pesos, y Hábitat para la Humanidad México, 1.8 millones más.
Con el programa se construirá, en 39 colonias ubicadas en Zonas de Atención Prioritaria y diez localidades rurales, 176 viviendas que constan dos cuartos, baño, cocina, sala y comedor.
Una de estas casas ya fue concluida en la congregación Chiltoyac y pertenece a la señora Ana Luisa Rosas Ladrón de Guevara y su familia, quienes durante años trabajaron por un lugar digno para vivir, pero por complicaciones de salud y otros factores, no habían podido obtenerlo.
De acuerdo con la beneficiaria, apenas una semana después de inscribir su terreno -que recibió en donación por parte de su padre-, los inspectores le informaron que toda la documentación estaba en regla, y tras 15 días les solicitaron iniciar con la preparación del predio para proseguir con la construcción.
Ana Luisa Rosas dijo que la ilusión de tener una casa era tan grande, que tanto ella como su esposo y sus dos hijos trabajaron cada noche y los fines de semana completos para hacer lo que los arquitectos necesitaban para iniciar la edificación.
Expuso que anteriormente se había visto obra en las congregaciones, sobre todo de caminos, pero no de esta calidad, ni había un apoyo directo a la comunidad como con las casas que ahora se realizan: “Estas obras sí son para toda la vida”.
Agradeció el apoyo de las autoridades de todos los órdenes de gobierno, de los trabajadores y de la comunidad en general.
“Nos emociona mucho que sea una realidad. Tenemos fotos de todo el proceso como un grato recuerdo de todo el trabajo conjunto y de cooperación. Vamos a tener un hogar digno para nuestros hijos”, concluyó.
